Un original hotel turístico y rural en plena naturaleza. Se trata de una finca de 70.000 metros cuadrados, de gran riqueza paisajística y vegetal enclavada sobre una ladera de la Sierra Calderina, en el término municipal de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real), en pleno corazón de La Mancha y dentro de las primeras Estribaciones de los Montes de Toledo, muy cerca del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel y en la auténtica Ruta del Quijote. Galardonado con el Premio Turismo de Castilla La Mancha 2004.