La Virginia es un pequeño restaurante familiar y acogedor. Está escondido en uno de los rincones más bonitos de Marbella.Es un lugar tranquilo, agradable y romántico en las noches de verano y verano, se envuelve de suaves perfumes de dama de noche y de madreselva.De Bélgica vino y descubrió este rinconcito. Eso fue allá por 1970. Pierre Delvaulx llegó con su hermano Vincent, y se intalaron en La Virginia. Con altos y bajos, con mucho trabajo, se está afianzando y aquí sigue.Ahora su hijo Alfonso, comparte con él los fogones y el quehacer diario. Sus platos emblemáticos: Crêpe de cebolla, Pâté de sardinas, sus salsas y la tarta de chocolate.