EL JINETE SIN CABEZA, nombre que nace de una antigua leyenda andina, referida a un hombre que a fines del siglo XIX, adquiere una llamativa fama entre los obreros que construían el primer ferrocarril en la zona cordillerana. Las precarias condiciones de alimentación, ropas y viviendas de esa gente, comienzan a cambiar cuando un solitario personaje a caballo inicia una serie de asaltos a particulares con dinero y ejecutivos del ferrocarril, que cruzaban los caminos de entonces. El dinero y abrigos robados, los destinaba para satisfacer el hambre y otras necesidades de los trabajadores, que lo bautizaron como EL FUTRE. El nombre se dice que es una deformación de Foster, el apellido de un contable inglés que sufrió el primer robo importante, ya que llevaba consigo los salarios para todo el personal de mayor jerarquía. La reacción policial no se hizo esperar y lograron dar con EL FUTRE, al que acorralaron cerca de la ya habilitada primera estación ferroviaria. En plena carrera a caballo el asaltante cayó sobre las vías y fue embestido por las ruedas del pesado convoy, que destruyeron su cabeza, sin posibilitar la identificación del jinete. La leyenda de EL FUTRE comienza entonces, ya que son muchas las personas que aseguran haber visto a EL JINETE SIN CABEZA, aparecer por las noches a pleno galope atravesando el caserío donde moraban capataces, ingenieros y otros directivos del ferrocarril. Muchos aseguran haberle disparado y siempre sin éxito. Hasta el final de la construcción de las vías férreas, EL JINETE SIN CABEZA, siguió con sus fantasmales apariciones. Familias que han atravesado la cordillera, aseguran haberse cruzado posteriormente con un sujeto, que afirman que era EL JINETE SIN CABEZA… Nota: Hay versiones similares en distintos lugares de América y Europa, aunque en cada lugar la historia se cuenta de forma distinta, con toques y tintes regionales, pero con una gran similitud en un punto clave: siempre se refieren a EL JINETE SIN CABEZA. Otra nota: Escritos posteriores a los sucesos arriba mencionados, dicen que el inglés Foster fue asaltado por un grupo de ladrones, que se llevaron los salarios de todos los empleados. Lo golpearon y le dejaron tirado sobre las vías. El tren cortó su cabeza. Para esta versión, nace el nombre de EL FUTRE, como deformación del apellido Foster, que luego sería EL JINETE SIN CABEZA cabalgando por las noches en su caballo, buscando a sus agresores en zonas cercanas a las vías del ferrocarril. A.L. Pérez Vogel